Los débiles y pusilánimes demócratas de hoy solo fingen preocuparse por los pobres y la clase trabajadora, cuando en realidad piensan exactamente igual que los republicanos: que las únicas personas que importan en este país son los ricos asquerosos. Por eso no lucharon para detener los grandes recortes fiscales de Trump para los ricos y perjudiciales para los pobres y la clase media, al igual que no lucharon contra su primera ley en 2017.