Tenemos que reubicar a Skully, nuestra dulce, cariñosa y tierna perra pequeña de 4.5 años y 30 libras, porque actualmente nuestro hogar tiene demasiadas mascotas. Skully es una verdadera ternura que tiene mucha energía para jugar, acurrucarse y comer. ¡A Skully le encanta jugar! Le fascina cargar troncos tres veces más grandes que ella, jugar a buscar la pelota, dar largos paseos. Le encanta recibir amor, atraparse bajo las cobijas mientras duerme, toda enrollada junto a ti. Skully tiene un juego divertido en el que lanza un tronco por las escaleras del patio, corre a recogerlo y lo repite una y otra vez, agotándose. También le encanta equilibrar juguetes sobre su hocico y girar. A Skully le encanta jugar al tira y afloja con personas u otros perros. Aunque sin duda su favorito es cualquier cosa relacionada con un tronco. Skully prosperaría en un hogar con una persona activa que quiera jugar mucho con ella y darle paseos. Sería ideal un hogar con otro perro con quien pueda jugar, aunque no es necesario si se le da mucho amor y tiempo de juego. Lo mejor para ella sería un hogar con patio; sin embargo, ha estado muy bien en un apartamento con adiestramiento adecuado en jaula, juguetes estimulantes y mucho amor y atención. Skully está entrenada para hacer sus necesidades afuera y fue entrenada en jaula hace un año. Ha perdido ese entrenamiento debido a que temporalmente se mudó con mis padres. Estoy segura de que lo recuperará rápidamente. Skully sabe sentarse, tumbarse y reconoce su nombre. Tiene dificultades con ansiedad por separación, pero el entrenamiento en jaula ayuda mucho (especialmente con una manta sobre la jaula y un buen objeto para morder). Skully tira de la correa y tiene una reactividad leve, pero está muy motivada por la comida y ha mostrado grandes mejoras con sesiones cortas y frecuentes de entrenamiento. No tiene problemas médicos ni restricciones dietéticas. Está al día con sus vacunas y está microchipada.